MALOS HABITOS

En estos ultimos años me he echado al hábito de levantarme temprano, y quiero aclarar que no es por mi gusto, es debido a la pinche escuela, yo siempre le he dado la razón al que una vez dijo que: Levantarse temprano no sólo es muy desagradable, sino completamente idiota.

Los efectos de madrugar son de muchas índoles, pero todos ellos corroen nuestra personalidad. Hay unos que se levantan temprano a fuerzas, van al baño y se paran frente al espejo a bostezar y a arreglase o a lavarse el cabello y la cara, pretendiendo dar la impresión de que se bañaron. Los que alcanzan lugar sentado en el camión que lo lleva a uno al trabajo, siempre van durmiéndose en el hombro del vecino, desayuna en la esquina del lugar donde trabaja unos tacos o una torta, - depende – hay de gustos a gustos, o bien hay unos muy osados y se tragan dos huevos crudos metidos en jugo de naranja (de esos jugos biónicos) – se ha comprobado que eso es una mezcla que produce cáncer en el intestino delgado - . Ese pasa la mañana sintiéndose infeliz, trabajando poquito y quitándose las lagañas; y se va de vuelta en el camión a las siete de la tarde.

Los que madrugan por gusto están peor. Son de los que repiten el consabido que; “al que madruga, Dios lo ayuda”, que es una afirmación que carece totalmente de argumento histórico.

Ellos creen que todo lo que tienen, Dios se los ha dado por el gusto de verlos levantarse temprano, desayunan un pan tostado bajo en calorías, y un café recién molido y todavía se dan tiempo para hacer ejercicios en el club deportivo X, y rasurarse en el baño de vapor, se van a trabajar como nuevos.Llegan a los sesenta como jóvenes, dando de brincos y mueren a las sesenta y uno, víctimas de una trombosis cuádruple.

Los que inventaron que era bueno levantarse temprano son los mismos que inventaron el “cambio de horario” ellos son los únicos culpables de que la ciudad empiece a funcionar a una hora donde nada bueno puede esperarse.

Y usted, amable lector; ¿tiene algún mal habito?